En estos días hemos escuchado profusas notas e historias sobre el 11 de setiembre
- ¿De cuál? Se preguntará Ud.
-¿Cómo de cuál? Le contesto. ¡Del único!
-¡¿Cómo del único?! y sí ¿el de 1973 o el de 2001?
-Bueno, paso a explicarme. Todos sabemos que en esta misma fecha sucedieron 2 hechos aberrantes para la historia de la humanidad; uno el golpe de estado en chile y el otro el pseudo atentado a las torres gemelas.
-Sí, si ya sé, si no hemos hecho otra cosa que escuchar los testimonios y vimos videos de todo tipo que muestran que 2 aviones “embocaron” las Torres gemelas que se desplomaron más tarde como si fueran de papel. Un “atentado” que fue pensado y por un individuo que no sabemos si de verdad existió, al que dieron por muerto 3 o 4 veces y cuando aparentemente lo mataron tiraron el cadáver al mar. ¡¡¡¡Dejáte de joder!!!!
No quisiera parecer soberbio ni pedante, pero si me dice que todavía cree que el “atentado” del 2001 fue obra de Bin Laden yo estoy tentado de decirle que no se olvide poner los zapatos acompañados de pasto y agua el próximo 6 de enero, ah! y no se olvide la cartita con los pedidos. Yo entiendo que aquí, en estas páginas virtuales, se haya sorprendido al leer algún que otro disparate. Pero si algo creo, es que mis lectores son personas sumamente inteligentes (faltaba más, de nada), por lo que no seré yo quien diga que aquel que siga en la creencia que fue Alqaeda quién ejecutó el “atentado”, es un “boludo” importante. De ninguna manera, pero amigo lector, si es de estos últimos tiene una notable oportunidad de evitar que se lo digan por ahí, vio como es la gente (porfiada y perversa), se le van a reír en la cara y para evitarle ese mal momento, aquí estoy yo con un “surtidito” de videos como para que se convenza.
Porque en realidad de la caída de las torres lo único verdadero fueron los cerca de 3000 muertos que dejó la insania mental de J.W. Bush.
Como dijo el inefable Julio C. Castro (Juceca) a través de su personaje Don Verídico en su cuento VERDADEROS ATROPELLOS: “Entre los diversos sistemas de defensa que implementa el hombre ante los peligros que muchas veces lo acechan, otras veces lo desechan y no pocas lo cosechan, se encuentra el humor. Dicen que la costumbre de contar cuentos en los velorios se origina en la necesidad que tiene el hombre de espantar a la muerte, de ningunearla en sus propias narices, (o las del finadito, que en paz descanse), y de ahí esa costumbre de faltarle el respeto ya que, por más que insista y se repita, la muerte es un fracaso. Y en este velorio universal que nos han impuesto de banderas a media asta y minutos de silencio (que no pasan de veinte segundos cada uno porque el minuto por televisión es muy caro) no debe faltar el toque de humor que nos ayude a evitar el pánico que está sembrando gente que debiera ser más seria y dedicarse a sembrar algo positivo, como ser trigo y porotos payares. Tener una guerra declarada y no saber todavía a quién, no es serio. Movilizar a toda la marina de guerra para atacar a un país que no tiene costas, no es serio. Saberse y declarase el país más poderoso del mundo (y el más enojado), y pedirnos ayuda a nosotros los uruguayos (que nunca nos enojamos) para ir a un lugar que nos queda tan a trasmano, y justo cuando nos afanaron las balas, no es serio. Mi amigo Mario Delgado (que es mucho más serio) me decía que considera y comprende la tragedia de las Torres Gemelas de EE.UU., pero que en Minas, Departamento de Lavalleja, también vivieron una terrible tragedia cuando el caso de las dos gemelas Torres, las hermanas Maruja y Leonor Torres, dos negras preciosas, a las que también voltearon, en una acción que, al igual que la otra, fue un verdadero atropello. La comparación puede ser cuestionable, pero es hora de respetar no solo al Departamento de Estado de Estados Unidos, y su enojo, sino, también al estado del Departamento de Lavalleja, y su bronca. Porque, al final de cuentas, cada cual tiene las gemelas que puede. Y a nadie le gusta que se las volteen.”
Tras esta brillante intervención les dejo el material para que ustedes saquen sus propias conclusiones.
Pasen y vean:
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